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"POR QUE SOMOS MAS SI PERDONAMOS"

El manejo de nuestros duelos 

Entendemos por “Duelo” al sentimiento que se produce ante un proceso de pérdida (accidentes, muerte de un ser querido, delitos sexuales, robo, cambio de domicilio, final de un ciclo escolar, ruptura amorosa, entre muchos otros),  la persona que experimenta el proceso de duelo, atraviesa por diversas fases tales como: negar que haya sucedido, sentimientos negativos como la ira o el enojo, posteriormente una fase de negociación (acepta que el hecho sucedió) y finalmente la depresión.

 

La importancia de llevar un adecuado cierre del duelo permite a la persona poder reponerse y resolver el estado por el que pasa. Cuando la persona no supera la pérdida y no se da un adecuado cierre, se mantiene estancado en una etapa de las ya mencionadas, esto se puede prolongar incluso por varios años y afectando diversas áreas de su vida (pareja, familia, escuela, trabajo) a ello se le denomina como duelo complicado.

Los duelos complicados se clasifican en función de las características del proceso:
• Retardado (predomina el proceso de negar el hecho).
• Inhibido (imposibilidad de expresar lo que siente).
• Crónico (síntomas depresivos más allá de 12 meses).
• Enmascarado (presencia de síntomas físicos).

 

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